La verdad es que me parece un tanto extraño... después de este quiebre pensé que todo se me vendría abajo drásticamente - bueno, en parte así lo ha sido -, creí que no pararía de llorar y de pensar el por qué de lo sucedido y cosas así... claro, la tristeza que siento es inmensa - debo reconocerlo - pero podría haber sido peor, en estos momentos lo que me invade es esa sensación de angustia, de no poder hablar como gente madura y decir las cosas que me han parecido... - cómo decirlo? - inapropiadas - aunque ésta no sea la mejor palabra -; de no poder dejar las cosas en claro. Pero bueno... la vida sigue, no? a fin de cuentas a penas empiezo a vivir la vida, me faltan mil cosas por pasar, mil obstáculos que superar, muchas personas por conocer y demasiados sueños por cumplir... eso es lo que me ha levantado el ánimo en estos momentos, pero ¿cómo ignorar todo lo vivido? eso es algo que me resulta muy difícil. Es que ¡todo, todo, todo, todo! me hace recordarlo... hasta algo tan usual como caminar por la calle...
Quisiera poder seleccionar las cosas con las que me gustaría vivir, debo reconocer que cada momento que pasamos fue taaan especial - más que eso - y es por esto y por todo lo que aún siento que me cuesta ser yo completamente...
"El tiempo cura todas las heridas" ojalá sea cierto y pase todo - en lo posible rápido porque no es muy agradable estar así - y lo de "un clavo saca a otro clavo" bueno... sinceramente, a eso le encuentro un poco más de razón, pero aún no me siento preparada; según mi punto de vista es algo muy complicado y no quiero parecer un tanto "conservadora" pero debe llegar alguien indicado y obviamente uno nota ese "algo" que lo hace tan especial y no andar como mala de la cabeza ofreciéndose como un producto en liquidación.
En fin... a disfrutar de la vida porque la vida sigue y ya llegará alguien para alegrarla nuevamente, mientras tanto debemos permanecer felices como siempre lo hemos sido.
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